Anahil Trómpiz Torres
El mercurio está presente en las pilas que utilizamos para las cámaras, los celulares, los relojes de mano. Cada vez que arrojamos una batería a la basura, intoxicamos el planeta.
Los alumnos del YMCA School, en Nuevo Chorrillo, Arraiján, luego del taller de la campaña “Ponte pilas con tus pilas”. CortesíaUn proyecto piloto de recolección de pilas se ha lanzado en Panamá para mitigar la presencia del mercurio en el medio ambiente.La Alianza Contaminación Cero, el Grupo Parques Nacionales de Panamá y Ecologic, S.A. promueven esta propuesta, que se presentó en la primera reunión del grupo de manejo de desechos con mercurio, en la Universidad de las Naciones Unidas en Tokio, en marzo de este año.Con esta campaña, Panamá se convierte en el primer país centroamericano en aplicar este tipo de recolección que ya se lleva a cabo en otras naciones hispanas como México, Brasil, Bolivia, Ecuador, Argentina y Chile.
Metal peligroso. De acuerdo con Jorge Conte Burrel, de la Alianza Contaminación Cero, el mercurio es un metal pesado “muy peligroso” que al evaporarse contamina al medio ambiente y hace daño al organismo del ser humano.“Si las pilas las botamos en un basurero, al final terminan en el medio ambiente, la pila se va abriendo y con el tiempo se evapora el mercurio que hay dentro y eso llega al suelo o a las aguas de la ciudad”, explica Conte Burrel, al resaltar que una gota de mercurio puede contaminar hasta 600 mil litros de agua.“Existe mucha afectación [por el mercurio] en poblaciones que son vulnerables y consumen mucho pescado.
Hay comunidades expuestas al mercurio que han sido afectadas con enfermedades como el cáncer, así como enfermedades degenerativas del crecimiento, relacionadas con la intoxicación de metales pesados, llámense plomo, mercurio o cadmio”, agrega.Conte Burrel revela que el 80% de la basura que produce la población en Panamá está fuera de vertederos controlados, a los que considera “pataconcitos”, en referencia al cerro Patacón, donde se almacena actualmente la basura que desecha la ciudad de Panamá.
Es por ello que la campaña propone la recolección de pilas agotadas en recipientes, para evitar que queden al aire libre. “El 33% del peso de una pila es mercurio, y peor son las pilas de botón [de los relojes, calculadoras], de cuyo peso el 50% es mercurio. Son muy peligrosas estas baterías, algunas empresas en el mundo ya fabrican pilas sin mercurio y sin cadmio porque la ley en sus países los obliga”, señala.¿Cómo recolectarlas? La campaña denominada “Ponte pilas con tus pilas” consiste en recuperar las baterías agotadas que contienen mercurio en envases plásticos en los hogares y en recopiladores en aquellas empresas que son grandes consumidoras de estos dispositivos.
En casa se puede reutilizar un envase plástico, como una botella vacía de soda de dos litros, para que sirva de almacenamiento (basurero) de baterías. En el recipiente se abre un orificio en la parte superior (la boquilla del envase es muy angosta para guardar las pilas) para introducir aquellas de distintos tamaños que vayan desechando los miembros de la familia.
En el caso de las empresas, a través de un contrato anual de un valor de 500 dólares que ofrece la Alianza Contaminación Cero, puede obtener un recopilador de color naranja para dicha recolección, un taller de adiestramiento de la campaña para sus empleados y recibirá además un certificado de disminución de huellas ecológicas, firmado por el director general del programa global mercurio. Este certificado tiene validez para el reporte de responsabilidad social empresarial de la compañía.
La Alianza Contaminación Cero también impulsa una serie de talleres para las escuelas y empresas con el fin de orientarlos en la campaña. La intención de esta asociación es disponer 90 tanques en diferentes lugares de la provincia de Panamá, como programa piloto, y dos mil botellas plásticas, a través de la inducción de estos talleres.
Camiones designados. La empresa Recimax Recycling Services, S.A. se encargará de recolectar los envases donde hogares y empresas han almacenado sus baterías usadas, a través de una ruta que incluya los lugares en la capital donde se colecten pilas (como hogares, escuelas, universidades, negocios).
La recolección por parte de esta empresa se hará cada tres o cuatro meses, sin embargo, dicha compañía hará revisiones periódicas en estos lugares para cuantificar lo que se ha recolectado.Fernando Duque Cardoze, representante de Recimax, detalla que para esta campaña se designó un camión “con compartimientos especiales”, donde se pesarán y cuantificarán los envases para ser trasladados luego a un área de la bodega de la empresa. Allí se almacenarán y se mantendrán aislados para cuando se inicie el siguiente proceso de la campaña: la cementación.“Nosotros [Recimax] vamos a ser los guardianes de lo que se haya recolectado, lo cual pasará luego a un proceso de cementación que creará bloques suficientemente seguros como para hacer una plaza”, manifiesta Duque, quien espera hacer un primer inventario de lo recolectado el primer trimestre de 2010.
Arte incluido. Gabriela Batista, artista plástica y promotora de la campaña “Ponte pilas con tus pilas”, prefiere utilizar la palabra “recopilar” en vez de reciclar para referirse al propósito de esta iniciativa.
“Las pilas las vamos a almacenar para posteriormente encapsularlas con un material que las neutralice, secuestre e inhiba, mediante reacciones químicas, y las retenga para posteriormente solidificarlas”, expresa.
A juicio de Batista, la primera plaza que se pretende construir con la “recopilación” de estas pilas, luego de la cementación de sus envases, está programada para junio de 2010.
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